Nos llegaba de repente un encargo urgente que consistía en hacer una tarta en forma de costurero en tan solo un día. ¿En un día?. Dijimos que eso no era posible, pero el compromiso que era para nosotros (un familiar muy cercano) y las ganas que teníamos de hacer otra tarta hizo que nos pusiéramos manos a la obra.
De nuevo un bizcocho genovés y un relleno de crema pastelera nos servía como cuerpo de la tarta para empezar a decorarla. Aunque por estas fechas el curso había avanzado muy poco, podían verse algunos detalles que nos hacían ver que el curso iba a valernos de mucho.
Las flores Gerberas hechas con un cortador con espulsor quedaron preciosas. Además se le dio un pequeño toque con polvos color rojo que las dio mucho mas realismo.
Aunque todavía se notaban imperfecciones en los laterales, conseguimos que el fondant no se deshiciera por el agua como en la tarta anterior. Ya habíamos dado un pasito mas hacia adelante.
Les aseguro que para el tiempo que tuvimos para hacerla, salio de lo mas bonita y además muy rica.
Esperamos que os haya gustado.
Saludos!!!